Los cantes flamencos (1881)

Hugo Shuchardt


Título: Los cantes flamencos

Autor: Hugo Schuchardt

Edición: Gerhard Steingress, Eva Feenstra y Michaela Wolf

Epílogos: Gerhard Steingress y Michaela Wolf

Colección: De lo social, 23, «música»

Fecha de publicación: 13/05/2024

Formato: 140 x 195 mm.

Páginas: 228

PVP: 19 €

ISBN: 978-84-126975-6-8


Die cantes flamencos, de Hugo Schuchardt, es el primer texto sobre flamenco escrito en otra lengua que no sea español. Fue publicado en 1881, pocos meses después de que se publicara el primer libro dedicado por entero al flamenco, la Colección de cantes flamencos, recogidos y anotados por Demófilo, del que, además, es una réplica.

El texto de Schuchardt —incisivo, contundente y denso— contradecía la tesis principal de Antonio Machado y Álvarez (Demófilo). Donde Demófilo decía que el flamenco era originalmente gitano para luego 'andaluzarse' y convertirse en un «género mixto», Schuchardt le desdecía mostrándole cómo esas coplas son, más que gitanas, poesía «gitanesca», o sea, imitaciones. Como señala Gerhard Steingress en el epílogo a esta edición: «Si bien es cierto que, desde Demófilo, la pertinaz ficción del originario "cante gitano" pasó a ser el núcleo ideológico de gran parte de la flamencología tradicional, también lo es que el mismo año del nacimiento de esta falsa hipótesis, Schuchardt había aportado suficientes datos para su refutación».

Lo más curioso es que esta primera crítica al idealismo gitanista pasó desapercibida y el texto no fue traducido —ni prácticamente leído— hasta 1990, cuando Gerhard Steingress, Eva Feenstra y Michaela Wolf llevaron a cabo la tarea de colocar en su lugar un texto que se adelanta en un siglo a las primeras críticas a una flamencología en la que prácticamente no existe el disenso.

«Creo haber demostrado que los cantes flamencos no pueden considerarse de ningún modo como el declive de una antigua y auténtica poesía gitana, sino que son esencialmente una poesía andaluza que ha sufrido en su lenguaje, por de pronto, un cierto agitanamiento. De antemano podemos señalar que al buscar en los cantes otros elementos gitanos sólo han aparecido bien por casualidad, bien porque han sido introducidos en ellos por la afición, lo que quiere decir que no son de ningún modo elementos esenciales y originarios.» Hugo Schuchardt